Barranquilla, Colombia. La novena de Puerto Rico celebró hoy, martes, su primera práctica en el estadio Edgar Rentería en Barranquilla, Colombia.
El combinado nacional estuvo aclimatándose a lo que son las instalaciones deportivas, al caluroso clima que aloja la ciudad y cogiendo el ritmo de la competencia centroamericana.
El dirigente puertorriqueño Juan “Igor” González expresó “gracias a Dios llegamos sanos y salvos. Hicimos una práctica cómoda, relajada. Botaron el cansancio. La química está muy bien. El deseo que empiece el torneo está ahí”.
La practica comenzó con un calentamiento leve, de soltura muscular y estiramientos. Los grupos fueron separados con la batería de coaches liderado por Efraín “Cano” García, Julio Valera, José “Papo” Jiménez y Jaime Muñoz.
“Este grupo de muchachos que tenemos, estamos pensando en grande. Dios nos dio la habilidad y la fortaleza para nosotros ganar medalla en este torneo. Como siempre le he dicho a ellos: ‘si hubiese una más alta que el oro, la perseguiríamos. Tenemos una seguridad, primero en Dios, en ellos”, expresó orgulloso el debutante Dirigente de la novena boricua a la salida del estadio.
“Esas diez letras que dicen Puerto Rico tienen una adrenalina de un nivel tan y tan alto que ninguna camisa de un equipo de Grandes Ligas la tiene”, concluyó González.
El equipo de béisbol estará concretando varios fogueros con selecciones que estarán en la competencia para mañana, miércoles, y el jueves.
Intervención positiva de don Osvaldo Gil Bosh
El expresidente de la Federación de Béisbol de Puerto Rico y del Comité Olímpico de Puerto Rico, Osvaldo Gil Bosh, estuvo compartiendo un mensaje motivador y lleno de anécdotas que reforzaron la motivación de la novena puertorriqueña.
“Recuerden las palabras que (Roberto) Clemente me decía ‘nunca se quiten’. Ustedes están en un torneo que representan a Puerto Rico. Han estado aquí por su esfuerzo”, comunicó el líder inmortal del béisbol aficionado de Puerto Rico.
“El torneo es bueno para ganar medallas. No aflojen en ningún momento”, expresó emotivo Gil Bosh.
Al concluir su discurso, la novena puertorriqueña arrancaron en un aplauso sonoro.
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