Por Daileen Joan Rodríguez / Para La Isla Oeste
Aguadilla. El juez Hiram A. Cerezo De Jesús del Tribunal de Aguadilla solicitó al ministerio público y la Defensa, que estén preparados hoy miércoles, para presentar su argumento en el caso contra Juan Gabriel Camacho Ruiz, acusado de asesinar a su amigo y vecino del barrio Calvache en Rincón el pasado 10 de febrero.
El juicio contra el hombre de 28 años está supuesto a culminar hoy, una vez el abogado de defensa, licenciado Miguel Clar Reyes presente a su último testigo, que ha anunciado es una mujer extranjera.
Camacho Ruiz enfrenta juicio por cargos de asesinato en primer grado, portación de arma ilegal y apuntar y disparar un arma bajo el artículo 515 de la Ley de Armas, tras haber llegado al cuartel de Distrito de Rincón en una guagua Nissan, Titan, color blanca, con el cadáver de Orlando Iván Ruiz Méndez de 46 años y confesar al retén haber cometido el crimen.
Ayer, el ministerio público continuó los procesos con el testimonio del agente investigador Harry Muñiz, de la División de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Aguadilla, quien explicó al juez Cerezo De Jesús que el crimen se divide en dos escenas: la primera donde ocurrió el asesinato, en la Playa Los Almendros entre los edificios Sol y Mar y Casa Hines; y la segunda en el estacionamiento del cuartel donde llegó con el cadáver en la guagua.
A preguntas del fiscal Rufino Jiménez, el agente investigador narró detalles de las declaraciones que hiciera el acusado cuando le tomó confesión de lo que había sucedido.
“Me dice que (Iván) estaba como enamorado de él. Que lo tenía desquiciado. El (Juan Gabriel) lo busca a su residencia y lo lleva a Los Almendros. Le preguntó “qué va a pasar con nosotros”. (Iván) Le respondió “o me matas tú o te mato yo y nos vemos en el túnel del infierno”, narró el agente Muñiz, quien continuó diciendo que Juan Gabriel entonces le dijo que tomó el arma, se bajó de la guagua y empezó a disparar.
“Me dijo que él (Juan Gabriel) le había confesado (a Iván) que tenía papiloma humano y que (Iván) lo tenía chantajeado”, declaró el agente.
Cuando el acusado llegó al cuartel de Rincón, después de tirar el arma en la playa, le dijo al policía “yo lo maté, yo lo maté. Ahí está el cuerpo. Creo que lo maté”, declaró el testigo.
Iván presentaba múltiples impactos de bala en el costado del lado izquierdo. Dentro de la guagua se ocupó un casquillo de bala compatible con otros doce encontrados en la playa junto al arma registrada a nombre de Juan Gabriel. También se ocupó de la guagua una cartera que contenía dinero, cigarrillos, tarjetas de banco, un collar en camándulas, un “pen drive”, entre otras cosas, pero “nada delictivo”, según declaró el agente de Homicidios.
Durante el contrainterrogatorio el abogado de defensa estableció que del informe toxicológico se desprende que la víctima había dado positivo a sustancia controlada. El agente reconoció que nunca se comunicó con la patóloga forense.
El abogado planteó que el retén de Rincón Eliasil González, nunca tomó notas de la confesión que supuestamente hiciera su representado. A lo que el agente Muñiz aseguró en el estrado poder probar que la confesión se dio “libre y voluntariamente”, y que concuerda con la cadena de eventos que investigó del caso.
El testigo reconoció que no fue hasta el 24 de febrero que firmó su declaración jurada sobre el narrativo de la confesión.
El licenciado Clar Reyes anunció como testigo de defensa a Kate Morovsky, una mujer que aparentemente mantenía una relación con Juan Gabriel. Ayer leyó una conversación en inglés que la mujer sostuvo con Iván mediante la red social Facebook, en la que entre palabras soeces le advertía que dejara a Juan Gabriel tranquilo y lo acusaba de “diablo”, entre otras amenazas.
La testigo esta llamada hoy a declarar con la asistencia de un intérprete.
laislaoeste@gmail.com