Por Daileen Joan Rodríguez / La Isla Oeste
A un mes de haberse reportado el primer caso positivo a COVID-19 en Puerto Rico, los municipios de Las Marías y Maricao -al oeste de la Isla- no reflejan casos positivos en el mapa del panel de control digital que contabiliza las cifras oficiales con información que suministra el Departamento de Salud, los hospitales, centros de diagnóstico y tratamiento (CDTs), entre otros entes oficiales.
¿Realmente no ha llegado el virus allá? ¿Qué acciones se han tomado en estos pueblos de la montaña para atajar al virus?
Dice el refrán popular que “en pueblo chiquito, campana grande”, y ya va corriendo el rumor de que “en el pueblo de Las Marías hay un policía que tiene un hijo infectado”. “También hay dos personas contagiadas y no los refieren”. “Hay dos guardias penales y otras personas, que no sé porqué no salen (en las estadísticas del Departamento de Salud)”, dicen fuentes de este medio.
El alcalde Edwin Soto, señaló que -al menos de su propio conocimiento- no tiene información que confirme casos positivos al virus en su pueblo de Las Marías.
¿A usted, el Departamento de Salud no le ha informado de ningún caso en las Marías?, inquirimos. “¿De Las Marías?, no”, respondió.
Sí admitió que conoce del rumor del policía estatal, y que sabe que fue enviado a aislamiento, pero entiende que dio negativo a la prueba. Al preguntarle si el policía es residente en Las Marías, dijo que “esa información es confidencial”.
De otra parte, el alcalde también confirmó la desinfección del cuartel, pero dijo que el municipio llevó a cabo las labores al igual que en otros lugares del pueblo, como calles y áreas públicas y comerciales.
Con una población que ronda en los nueve mil habitantes marieños, el Centro de Diagnóstico y Tratamiento (CDT) de este pueblo en las montañas, reabrió operaciones el pasado mes de octubre como corporación municipal, tras años de un cierre que obedeció a la crisis económica. El alcalde precisó que hoy trabajan allí cerca de 20 empleados; aseguró que el servicio continúa; y sostuvo que tienen suficiente equipo y material para operar como un CDT ante esta crisis.
Soto reconoció que en el hospital han recibido casos sospechosos a COVID-19 pero “han salido negativos” en la prueba rápida con sangre, que es la que allí administran, dijo. A preguntas de este medio, el ejecutivo municipal no precisó cuántas pruebas han realizado al momento. “No tengo ese dato”, acotó.
¿A qué usted atribuye que el COVID-19 no haya llegado a Las Marías?, preguntamos al ejecutivo municipal. “La gente ha seguido las reglas, se han mantenido en sus casas, están usando mascarillas, se están protegiendo… y no ha llegado ese virus aquí, a nosotros”, respondió Soto.
El alcalde destacó que -del personal municipal- al momento solo está trabajando el de Manejo de Emergencias, la Policía Municipal, el CDT (hospital municipal), el Centro de Envejecientes, Saneamiento, y alguno que otro de la administración.
En Maricao, “hay mucha incertidumbre con esos números (estadísticas de Salud que no atribuyen ningún caso positivo al virus en ese pueblo), pero es la única “data” que existe”, dijo un maricaeño bajo condición de anonimato, en entrevista virtual con este medio hiperlocal.
“Casos sospechosos sí se han reportado como el reciente cierre del Krispy Kreme de Mayagüez; en dicho establecimiento laboran cerca de cuatro personas de acá de Maricao, están en aislamiento esperando por resultados del COVID, aunque algunas ya han reflejado negativo en los resultados”, acotó la fuente.
Ver: Cierra Krispy Kreme en Mayagüez por positivo a COVID-19
Por su parte, el maricaeño opinó sobre las razones particulares que puedan llevar a que no se reporten casos en Maricao. “Sí entiendo que somos un pueblo pequeño, no tenemos supermercados, ni farmacias donde las personas puedan aglomerarse en multitudes; por ende toda diligencia se hace en pueblos adyacentes. Las prácticas de la comunidad -en obedecer el toque de queda y las debidas precauciones al salir de sus hogares- han dado resultados positivos en cuanto a la lucha para poder controlar la pandemia”, acotó el maricaeño.
El alcalde Gilberto Pérez Valentín, no respondió llamadas de La Isla Oeste a su celular. Tampoco respondió mensajes de texto.
¿Qué gestiones comunitarias se coordinan para asistir a los ciudadanos y/o resolver el problema de salud en estos pueblos de la montaña?
La directora de la Fundación Bucarabón en Maricao, Jacqueline Pérez, confirmó que la gente en la montaña está tomando medidas para protegerse; y aunque reconoció haber notado alguno que otro caso con síntomas de virus, dijo que estos no van al hospital.
“Las personas que no van al hospital es porque los síntomas los controlan desde sus casas, a eso lo agrava el problema de no tener hospital en Maricao y entonces tendrían que moverse a los hospitales regionales; y los evitan al máximo por miedo a la propagación”, dijo la líder de la entidad sin fines de lucro dedicada a ofrecer educación y servicios a los agricultores de Maricao y zonas aledañas.
Cabe mencionarse que en este pueblo sí opera un Centro de Diagnóstico y Tratamiento, bajo la empresa Maricao Medical Center -en la Avenida Luchetti #9-, pero el mismo no está abierto al público todo el tiempo.
“Personalmente estuve llevando alimentos de los comedores escolares a varias comunidades. Observé que todas las familias estaban en sus casas, y tal vez dos a tres casos con síntomas, pero que no habían ido a ningún hospital”, acotó. “Estamos en la montaña y la propagación del virus es muchísimo más lenta por que las personas en su gran mayoría viven aisladas. Me sorprendió mucho que la gente, para atendernos, seguía los protocolos de distancia. Nosotros llevábamos máscaras y guantes puestos”, puntualizó Pérez.
La líder comunitaria destacó que en las próximas semanas Fundación Bucarabón estará trabajando un censo en conjunto con PR VOAD y una brigada de médicos, para determinar si hay casos sin contar en Maricao. PR VOAD consiste en organizaciones activas que trabajan juntas en momentos de preparación, respuesta, ayuda y recuperación ante desastres. Por el momento, están activos llevando alimentos y próximamente guantes y máscaras para distribución en las comunidades.
A preguntas sobre medidas que ha tomado el gobierno municipal, Pérez dijo que “hasta donde tengo entendido, fuera de limpiar las calles del pueblo, no he visto o escuchado alguna gestión del municipio”.
Por su parte, el líder comunitario Víctor Vega Rodríguez, de la organización sin fines de lucro CAMBU (Centro de Apoyo Mutuo Bucarabones Unido), afirmó que también ellos han estado repartiendo donaciones de alimentos de Comedores Escolares a los campesinos que los reciban.
“Se identificaron algunas familias que no están trabajando, que no tienen aportación de desempleo, que tienen niños… y ellos les estamos dando esa donación de alimentos”.
CAMBU surgió en 2017 con la misión de atender las necesidades de sectores rurales en Las Marías, creando oportunidades de crecimiento comunitario a través de experiencias educativas, recreativas y culturales. Se sustenta por medio de donaciones.
“Después que empezó lo del COVID nos aislamos, nos quedamos en las casas. Yo soy el único que subo (a las regiones apartadas); si hay que entregar algo, voy a las casas para llevar provisiones, siempre y cuando la persona esté dispuesta a recibirme. Si no, ellos llegan a mí y les entrego las cosas, porque no todo el mundo nos va a recibir”, acotó, dejando constar el celo que tienen los campesinos de exponerse al virus y del ajeno.
Vega Rodríguez afirmó que en lo que ha podido observar de la gente que ha visitado, “todos toman sus medidas, están tomando sus precauciones. Hasta ahora no hay nadie enfermo. Todo el mundo está hasta el momento estable. La gente está encerrada en sus casas, no te abren la puerta de la nada. Te preguntan, no saludan. Todo es a distanciamiento”, puntualizó. También reconoció haber escuchado los rumores de infectados con COVID-19 en el pueblo, “pero desconozco. No tengo más detalles de eso”, concluyó.
El rol de los centros de salud
De otra parte, el administrador interino de la Clínica Migrant Health Center en Maricao, Néstor Bracero, dijo en entrevista telefónica con La Isla Oeste, que “en momentos de esta emergencia nosotros no estamos transportando pacientes (a la clínica, como es regular). Nosotros sí estamos llevando medicamentos al hogar”, mencionó, destacando que la persona que lleva los medicamentos a los hogares de los pacientes del MHC –que opera como Centro de Salud 330- también portan batas, guantes y mascarillas.
Además, la clínica –que ubica en la calle Zuzu Arregui #7, en Maricao- se ha mantenido entregando medicamentos a pacientes en la farmacia, y no se atienden consultas, las que ahora se continúan haciendo por telemedicina. “A menos que sea un caso específico, tenemos un área separada en la Clínica”, dijo.
Sobre si han observado casos sospechosos por COVID-19, Bracero respondió que “no, no hemos tenido aún (casos) sospechosos”. Reconoció que las limitadas pruebas que estará suministrando la clínica –únicamente para pacientes de MHC- llegaron el pasado miércoles. Al momento no han realizado ninguna. Una merma en pacientes que buscan los servicios de MHC durante este periodo de cuarentena ha sido notable en Maricao, confirmó.
De igual forma, la administradora de la clínica MHC en Las Marías, Ivette Pérez Rodríguez, afirmó que no han atendido casos sospechosos al COVID-19 en su centro de salud. “Nos sentimos hasta ahora –por decirlo así- bastante tranquilos de ver que todavía en el mapa no aparecen casos ni en Maricao ni en Las Marías», dijo.
Destacó que los protocolos de los centros de salud 330, que están obligados en ley a responder durante estas emergencias- son afines con los protocolos adoptados por el Departamento de Salud, “donde cualquier paciente sospechoso que se envíe a hacer una prueba, debe dársele ese seguimiento… tenemos que informar todos los días cualquier situación sospechosa y cuál ha sido el rastreo que le hemos dado a ese paciente, para asegurarnos que se hizo la prueba; saber resultados; y darle continuidad a su tratamiento”, dijo en relación a los protocolos de MHC en toda la Isla.
Actualmente en la clínica MHC de Las Marías no hay laboratorio disponible, por lo que de ser necesario, el paciente con síntomas sospechosos sería referido internamente a otra de sus clínicas autorizadas, acotó Vega Rodríguez. “Al momento no he enviado a nadie, ni a laboratorio de Migrante (MHC) ni a laboratorio externo, porque no hemos tenido ningún criterio médico para enviarles a hacerle la prueba”.
Pérez Rodríguez aprovechó para reconocer las medidas que han tomado ambas administraciones municipales en torno a la prevención de contagio desde el primer momento.
Recordemos que el COVID-19 llegó a Puerto Rico el 8 de marzo, en un paciente de crucero. El 12 de marzo la gobernadora Wanda Vázquez Garced emitió una declaración de emergencia para Puerto Rico (OE-2020-020).
A 24 horas de dar inicio el Festival de la China Dulce en Las Marías, la administración municipal canceló la tradicional fiesta como medida preventiva. A este festival, que se celebraba del 13 al 15 de marzo, asisten miles de personas, por lo que el impacto económico para comerciantes y agricultores fue fatal. De hecho, muchos optaron por vender sus productos agrícolas y dulces preparados en masa para estas fechas, a través de las redes sociales. Se desconoce aún el total de la pérdida económica.
“Se tomó la sabia decisión de suspenderlo. Esto evitó que hubiera una aglomeración de personas de distintos pueblos”, puntualizó Vega Rodríguez, destacando que Migrant Health Center fue el auspiciador principal del Festival de la China y pese a esto, acató la decisión. “Fue una medida muy a tiempo que no puesto en riesgo la vida de nadie”, dijo la marieña, manifestando que entonces sintió una gran tranquilidad por su salud y la de los suyos.
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Periodista con 17 años de experiencia en periodismo hiperlocal. Fundadora de One Red Media / La Isla Oeste. Miembro de la Junta Directiva de la Asppro. Para preguntas o comentarios escribe a: daileenrodriguez@gmail.com
