Por One Red Media
Mayagüez. Confesó todo con lujo de detalle.
La fiscalía de Mayagüez confirmó que el nieto de los ancianos asesinados el pasado sábado en Cabo Rojo confesó haber cometido los hechos.
Según detalló el fiscal José Arocho, el móvil alegadamente fue la “falta de amor”.
“Se entrevistó. Se le hicieron las advertencias de Ley y decidió declarar. Nos confesó todo con lujo de detalles todo lo que hizo”, adelantó el fiscal.
En la tarde de hoy se estará terminando de levantar el expediente para radicar cargos contra Justine Andrés Acosta Macgowan, de 23 años, por Asesinato en Primer Grado, Ley de Armas y Ley Vehicular por la apropiación de la guagua de la abuela en la que fue detenido.
“La motivación que el da es que no tenía trabajo, no tenía dinero, no tenia pareja, que no tenia sexo, que ni amor. Esa es practicante la motivación que él da. De hecho, incluso nos expresó que lo había planificando. Que llevaba varios días considerándolo”, detalló el fiscal a preguntas de La Isla Oeste.
Según explicó, todo lo dicho por Acosta Macgowan coincide con lo investigado en la escena del crimen.
“Nosotros estuvimos allí 14 horas en la escena y todo se puede corroborar”, acotó Arocho.
Acosta Macgowan se estaría enfrentando a 99 años de cárcel por el delito de Asesinato. La ley de armas conlleva una pena de entre 6 meses a 3 años, y el agravante le suma el doble de tiempo consecutivo. El fiscal no descartó solicitar agravantes por la naturaleza del caso y la crueldad con la que se cometieron los hechos.
Las víctimas fueron identificadas como Jorge A. Acosta López, de 80 años y su esposa Norma Ojeda Martínez de 68, quienes fueron encontrados en el patio de la residencia, frente a la puerta de entrada. La otra víctima, Pedro Bonilla Acosta, primo de Acosta López y también de algunos 80 años, fue hallado en el segundo nivel de la casa.
Todos fueron masacrados con un machete que fue ocupado. Figuran como pruebas la ropa del sospechoso que fue encontrada en la escena llena de sangre.